sábado, 11 de mayo de 2013

Mas Restos de Caamaño que LOS TENÍA GUARDADOS SU PRIMO CLAUDIO CAAMAÑO


Santo Domingo-Guardado bajo estricto juramento el secreto entre cuatro personas, durante más de 26 años, nuevos elementos relacionados con el destino de los restos del Héroe de la Guerra de Abril de 1965 y comandante de la guerrilla de 1973, el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, fueron agregados ayer al debate sobre este deslumbrante tema nacional, tras ser revelada la existencia de restos del cráneo y costillas, preservados por su primo y compañero de combate, Claudio Caamaño Grullón.
Una parte de la osamenta fue apartada en mayo de 1987 en la Iglesia La Paz, situada en el Centro de los Héroes, el mismo día cuando eran expuestos en un ceremonial religioso.
La decisión fue tomada por una razón poco conocida hasta ahora: había una seria amenaza de enemigos de Caamaño Deñó de cometer “un desastre” en el templo religioso.
Eso lo afirma Claudio, quien preservó una parte de los restos del guerrillero, como medida de prevención.
Desde ese tiempo, hace 26 años, estaban celosamente guardados en su residencia, localizada en una apacible y exuberante colina sembrada de frutales, en un extremo de este caserío rural .
Hasta aquí llegó ayer una delegación de peritos forenses, encabezada por el director del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), Francisco Manuel Gerdo González, dos patólogas, una antropóloga y una analista forense, que ante la presencia de parientes del coronel Caamaño Deñó, un representante de las Fuerzas Armadas, del Ministerio de Cultura y la fiscalía de Peravia, hicieron un levantamiento de los restos.
Tras el descubrimiento, por primera vez, de las osamentas que se afirma con rigor corresponden al Héroe Nacional, originalmente sepultadas en el cementerio de la avenida Máximo Gómez, y más reciente exhumadas para pruebas de ADN, la otra parte sacada de la urna en la iglesia La Paz fue bien preservada en la residencia de Claudio.
Templo
Claudio Caamaño, primo y compañero de guerrilla del Héroe de la Guerra de Abril, reveló ayer que parte de la osamenta fue guardada en el templo religioso para fines de preservarlos en caso de eventualidades, y retiradas mediante acto notarial firmado por el abogado Renato Rodríguez Demorizi, a las 4:30 de la tarde del 8 de mayo de 1987.
El retiro de los restos óseos fue hecho en presencia del párroco de la iglesia La Paz, el español Calixto Vriarte, y del comerciante William Méndez Núñez .
Y fue hecho, según consta en el documento, bajo estas premisas: “La referida extracción tiene por finalidad preservar este grupo de huesos del finado coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó para el caso de que, por cualquier eventualidad, sus restos depositados en la urna (sean) violados, dañados o hurtados, o por cualquier causa fueran desaparecidos, estos puedan sustituir a aquellos”.
Del cuidado y protección fue responsabilizado Claudio Caamaño, “quien se compromete y obliga a cuidar de ellos, guardándolos en un lugar total y absolutamente seguro, para los fines de la posteridad y la historia”.
Los restos estaban envueltos en un lienzo, herméticamente protegido dentro de una pequeña urna rectangular, encerrada en la gaveta de un archivo de metal, colocada en una habitación de la residencia de Claudio y su esposa, Fabiola Bélez Catrain, que fue abierta a la comisión de peritos del Inacif .
Tras abrir el estuche, seguido del protocolo de rigor, para evitar contaminación de los restos, las patólogas Ana Falette y Práxedes Apolinario, la antropóloga Sonia Lebrón y la analista forense Mariela Sánchez, hicieron un inventario de los huesos y luego los depositaron en una caja del Inacif, que fue enviada a Santo Domingo para fines de análisis.
NO HAY FECHA PARA LOS RESULTADOS
El titular de Inacif, Francisco Manuel Gerdo Morales, dijo a LISTÍN DIARIO que ese organismo trabajará ahora con el conjunto del material óseo en su poder, que se presume corresponde al coronel Caamaño, sin adelantar fecha para dar un resultado de la experticia forense.
“Nos basamos en la calidad del análisis”, dijo Morales, indicando que, por ahora, “no sabemos si estos (restos) tienen ADN”.
Al acto formal de entrega de las osamentas al Instituto de Ciencias Forenses asistió el general Leonidas Pérez Pérez, representante de las Fuerzas Armadas ante la Comisión de Exaltación de Caamaño en el Panteón Nacional; Vicenta Vélez y Alberto Caamaño, viuda e hijo de Caamaño, el fiscal de Peravia, Miguel Cuevas Paulino; Barina Caamaño, responsable de la Fundación Caamaño ante los organismos del Estado, y el antropólogo Abelardo Jiménez Lambertus, quien exhumó los restos de Caamaño en 1987.fuente/listindiario