El canal citó al secretario ejecutivo de la Organización del Tratado de Prohibición Total de Pruebas Nucleares (CTBTO), Tibor Tóth, quien no precisó las cantidades exactas de radiación pero descartó que pudieran ser consideradas dañinas para la salud humana.
La estación situada en Sacramento, que pertenece a la red de monitores con la que la CTBTO trata de asegurarse de que no se viole su tratado contra las pruebas de armas nucleares, detectó pequeñas proporciones de radionúclidos, es decir, sustancias que emiten radiación.
Sin embargo, el descubrimiento no debe ser motivo de alarma, según dijo a la CNN el funcionario de la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, en inglés), Graham Andrews.
"Por ahora no hay ninguna preocupación en Japón o en ningún otro sitio en torno a la salud humana", aseguró Andrews.
El hallazgo coincide con la predicción emitida el jueves por expertos meteorólogos y de salud de Estados Unidos, que vaticinaron que los primeros isótopos radiactivos provenientes de la central nipona podrían llegar hoy a la costa oeste del país, aunque en dosis inofensivas para la salud.
Según indicaron, los residuos tóxicos filtrados al aire en Fukushima estaban terminando de recorrer los 8.000 kilómetros de distancia que separan Japón del territorio continental estadounidense, empujados por las corrientes de las altas capas de la atmósfera.
Ese anuncio provocó que en muchas tiendas de California comenzaran a agotarse las existencias de píldoras de yoduro de potasio, que previene la absorción de yodo radiactivo, lo que reduce la amenaza de sufrir cáncer de tiroides a raíz de la radiactividad.
La demanda de ese tipo de píldoras se ha disparado en todo el país, como demostró el anuncio que hizo el martes la firma farmacéutica Nukepills.com, cuando indicó a través de Twitter que había agotado sus existencias de píldoras de yoduro.
Las autoridades de salud han advertido contra el uso preventivo del yoduro de potasio, puesto que el medicamento puede causar efectos secundarios graves, especialmente para personas que tengan alergias.
La Comisión Reguladora Nuclear, que supervisa el sector de ese tipo de energía en Estados Unidos, prevé que la radiactividad que llegue a las costas estadounidenses no tendrá consecuencias para la salud, aunque reconocen que los niveles de radiación subirán con el paso de los días debido al empeoramiento de la situación en Fukushima.fuente//listindiario.com.do