sábado, 17 de julio de 2010

Aprende de sus errores Max Santos, del grupo Aventura

Tras declararse culpable ayer, viernes, de un cargo menos grave de agresión por haber herido a Luz Cortés en uno de sus conciertos en la Isla en 2008, el bajista del grupo Aventura, Max Santos, tendrá que pagar una multa de $1,000 y una pena especial de $100 fijadas por el juez Harry Massanet Pastrana, del Tribunal de Primera Instancia de San Juan.
Max Santos asegura haber aprendido la lección luego de aceptar su culpabilidad mediante un acuerdo previo entre su abogado Edgar Vega y la fiscalía, representada por Lizette Sánchez.
“Es una lección bien grande. En la vida, toditos cometemos errores. Al mismo tiempo, me siento tranquilo, confiado. Yo sé que tengo esos fans verdaderos que saben que yo los quiero mucho y los respeto. Gracias a Dios, Aventura sigue hacia adelante; todos los conciertos están llenos”, reveló el músico.
A su salida de la sala 1103 del magistrado Massanet Pastrana, el intérprete, quien guarda gran parecido con su hermano Lenny Santos, agregó que “nadie es perfecto y de los errores uno aprende”.
Los hechos en este caso se remontan al 10 de diciembre de 2008, cuando Aventura finalizó una de sus presentaciones en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot, y Luz Cortés resultó herida en su ojo y pómulo derechos cuando el músico lanzó efusivamente el micrófono hacia el público.
Max Santos, asimismo, reveló a Primera Hora que sus compañeros Henry Santos, Leny Santos y Anthony “Romeo” Santos le han aconsejado a raíz del incidente y “siempre me apoyan, siempre tranquilos y enfocados en la familia y en el trabajo”.
“Voy a aprovechar este tiempo libre y pasar tiempo con mis hijos”, acotó el artista, quien se marcha hoy, sábado, hacia Nueva York, donde reside.
A Max Santos, se le había imputado inicialmente un cargo por el artículo 124, que es una negligencia criminal, que le permite el derecho a un juicio por jurado y la pena pudo ser una condena de seis meses a tres años de cárcel. Sin embargo, ese cargo se cambió por el artículo 121, que es una agresión menos grave, cuya pena es de $100 hasta un máximo de $5 mil, que, en su caso, fue de $1,100.
Satisfecha y sorprendida
Luz Cortés, por su parte, indicó a este diario sentirse “satisfecha porque se hizo justicia. Estoy más tranquila y fue demasiado tiempo para que se hiciera justicia”.
La demandante, por cierto, aseguró que se sorprendió con la presencia del bajista en la corte porque “por la fama que él tiene, no venía a las vistas y por lo menos llegó hasta aquí hoy (ayer) y enfrentó la justicia para que cumpliera, pero no lo esperábamos”.
Sin embargo, la demanda civil que mantiene contra Max Santos, por $5 millones, por daños y perjuicios, continúa y no tiene fecha todavía para la audiencia.
Su abogado Jorge Gordon, por otra parte, indicó sentirse “satisfecho porque se hizo justicia. Este tipo de actividad donde vienen unas personas a presentarnos su arte, la realidad es que no se puede evadir a la justicia de Puerto Rico. Si contra los nuestros se establece todo el peso de la ley, por qué no con las personas que vienen de afuera”.fuente//primerahora