sábado, 15 de diciembre de 2012

Un Maldito Desgraciado Acaba Con Connecticut: Tiroteo deja 27 muertos en una escuela, 20 de ellos niños


NEWTOWN, EE.UU.- Un total de 27 personas murieron este viernes, 20 de ellas niños, en un tiroteo en una escuela primaria de la ciudad estadounidense de Newtown, en la peor matanza de este tipo en varios años en Estados Unidos.
El presidente estadounidense, Barack Obama, pidió unidad nacional para tomar medidas que eviten la repetición de tragedias como ésta, en medio de numerosas peticiones para aumentar el control a la venta de armas ante los tiroteos masivos que ocurren periódicamente en el país.

El tiroteo ocurrió hacia las 09:40 de la mañana hora local (14:40 GMT), poco después del comienzo de las clases, en la escuela primaria Sandy Hook de Newtown (Connecticut), una ciudad de 27.000 habitantes del noreste de EE.UU. ubicada a algo más de 100 kilómetros de Nueva York.
Un portavoz policial, el teniente Paul Vance, de la policía estatal de Connecticut, confirmó en una serie de ruedas de prensa durante la tarde y la noche que en el colegio murieron en total 18 niños, así como seis adultos y el presunto autor del tiroteo.
Otros dos niños fallecieron en el hospital y otro adulto fue encontrado muerto en una “escena secundaria”, en un lugar no identificado, lo que eleva el total de muertos a 28.
Todos los niños fallecidos tienen edades comprendidas entre 5 y 10 años.
El autor ha sido identificado por los medios de comunicación (pero no oficialmente) como Adam Lanza, de 20 años, quien podría haber matado anteriormente en su casa a su propia madre, Nancy Lanza, que era maestra en esa escuela, antes de acudir al colegio para perpetrar la matanza.
Los medios señalaron erróneamente al principio que el autor sería Ryan Lanza, de 24 años y hermano mayor, pero éste último reside en Hoboken (Nueva Jersey) donde está siendo interrogado por la policía, aunque por ahora no se le considera relacionado con la matanza.
El autor, equipado con ropa negra y una chaqueta de camuflaje, entró a pesar de que la escuela había implementado recientemente un nuevo sistema de seguridad y restricción de acceso.
Según indicaron testigos, la directora de la escuela, Dawn Hochsprung, la subdirectora y la psicóloga del centro interrumpieron una reunión al oír los primeros disparos y se dirigieron a la zona donde estaba el atacante, pero solo la subdirectora volvió, con heridas en una pierna y un pie.
La subdirectora fue la única víctima que solo sufrió heridas, por lo que se cree que el autor actuó con sangre fría buscando matar al mayor número posible de personas.
Las autoridades encontraron muerta en una vivienda de Newtown a otra persona, cuya identidad no se ha confirmado oficialmente aunque algunas filtraciones a la prensa apuntan a que sería Nancy Lanza, quien tenía registradas a su nombre varias armas de fuego.
El autor llegó al lugar de la matanza con tres armas semiautomáticas, dos pistolas y un fusil.
El tiroteo duró unos pocos minutos y ocurrió en un pasillo y dos aulas de clase de la escuela generando escenas de pánico en un centro con entre 600 y 700 alumnos. El autor realizó aproximadamente un centenar de disparos.
La policía envió rápidamente a un importante números de unidades a la escuela, pero el tiroteo ya había terminado y no pudieron hacer nada, excepto comprobar que no había más atacantes mientras trataban de sacar de forma segura a los demás niños.
Al conocer que se había producido un tiroteo en la escuela muchos padres llegaron a toda prisa para encontrarse con el edificio rodeado por policías buscando a otros posibles pistoleros.
“Oímos muchos golpes y gritos”, explicó una niña poco antes de que sus padres se la llevaran a casa. “Un maestro me agarró y me metió en su clase”, relató de forma confusa otro pequeño, quien explicó que se oían muchos golpes.
La maestra Kaitlin Roig explicó entre lágrimas a la cadena ABC que se encerró en su clase y bloqueó la puerta con estanterías tras lo cual pidió a los niños que se quedaran totalmente callados.
La masacre ha caído como un mazazo en esta pequeña ciudad (28.000 habitantes) de los bosques de la región de Nueva Inglaterra, una zona tranquila, bonita y pacífica.
El portavoz Vance explicó por la noche que “la prioridad ahora es identificar a las víctimas. Por los padres queremos hacerlo lo más rápido posible”.
Obama, visiblemente emocionado y entre lágrimas, ofreció una declaración en la sala de prensa de la Casa Blanca, en la que subrayó que reaccionó “como padre”, no como presidente, tras conocer la masacre.
“Esta tarde, Michelle y yo haremos lo que sé que todos los padres de Estados Unidos van a hacer, que es dar un abrazo a nuestros hijos y decirles que los amamos”, agregó.
“Hemos sufrido demasiadas tragedias como ésta los últimos años”, afirmó Obama.
Después enfatizó: “Vamos a tener que unirnos y tomar medidas significativas para prevenir futuras tragedias como ésta”.
El tiroteo generó nuevos llamamientos a favor de medidas para un control efectivo de la venta de armas.
La de hoy es la segunda mayor masacre ocurrida en años recientes en un centro educativo de EE.UU. tras la ocurrida en la Universidad de Virginia Tech., en la que perdieron la vida 33 personas en 2007.
En 1999 se produjo uno de los incidentes más sonados de estas características, cuando dos estudiantes de 17 y 18 años asesinaron a 13 personas en la escuela de Columbine, en el estado de Colorado, antes de suicidarse.fuente/efe