El planteamiento fue hecho en un documento firmado por cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, leído durante la concelebración de una misa que presidió el purpurado al final de la caminata “Un paso por mi familia”, en la que participaron miles de personas. La marcha se efectuó en el Malecón de Santo Domingo con ocasión del mes de la familia.
Tras proclamar que “la familia debe ser la gran protagonista de las políticas publicas del Estado”, los obispos y la grey católica propusieron que los ministerios de la Mujer y de la Juventud, los consejos Nacional para la Ninez (Conani) y Nacional de los Discapacitados (Conadis), así como el Instituto de Protección de la Vejez y el Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, entre otras departamentos e iniciativas del sector publico, sean aglutinadas en una nueva institución que se llame Ministerio de la Familia.
El documento destaca la fecha como propicia para resaltar los valores de la familia y recuerda que en su artículo 55 la Constitución de la República declara que la familia “es el fundamento de la sociedad y el espado básico para el desarrollo integral de las personas y que se constituye por vínculos naturales o jurídicos, mediante la decision de un hombre y una mujer de contraer matrimonio por la voluntad responsable de conformarla”.
“Como iglesia nos comprometemos a vivir como verdaderas familias y proclamamos los grandes e insustituibles valores propios de la familia cristiana, como son la unidad e indisolubilidad del matrimonio contraido por un hombre una mujer, el amor conyugal, paternal y maternal, el amor filial y fraterno como fundamento del hogar”, señala.
La iglesia proclama la paternidad y maternidad responsable, el respeto mutuo, el valor y respeto a la vida desde su concepcion hasta la muerte natural, el diálogo, la reconciliación, el perdón, la comunidad de bienes y la colaboración mutua. Y propuso que “ante la realidad actual de las familias dominicanas”, se establezca como requisito que para contraer matrimonio civil o religioso las parejas realicen un curso preparatorio y que se implemente la educación sexual integral, basada en valores éticos y morales, en las escuelas y núcleos familiares.
La iglesia reclama, además, que se revise y se limite el porte y tenencia de armas de fuego, involucrar a los medios de comunicación en la formación de familias sanas y crear una red de establecimientos especializados para terapias de niños y niñas huérfanos traumatizados, sobre todo, aquellos que han perdido a sus padres debido a la violencia intrafamiliar.
Miles de personas participaron ayer en la caminata “Un paso por mi familia”, convocada por la Arquidiócesis de Santo Doimingo, y que encabezó el cardenal López Rodríguez, la vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández, y la primera dama de la República, Cándida Montilla de Medina.fuente/Rarmón Urbáez, Bethania Apolinar y Adriana Peguero